Los tratamientos de protección de estructuras de madera, preventivos y curativos por inyección e impregnación de protectores insecticidas y fungicidas contra la acción de agentes xilófagos, son una de las soluciones reflejadas en el Código Técnico de la Edificación, Documento Básico de Seguridad Estructural para Madera.
La permanencia en el medio (la madera) sobre el cual son aplicados los protectores, son limitados en el tiempo por exigencia de las directrices de la Unión Europea, lo que obliga para un buen gobierno, a implantar protocolos de mantenimiento periódicos de los elementos tratados de la estructura, precisando en ciertos casos la colocación de registros practicables que favorezcan su inspección.